Efi-Ciencia

El camino de la especialización es tan competitivo que no logra otra cosa que dejar a la mayoría de los mortales sin capacidad de entendimiento.

En tiempos de la era mecánica, la necesidad de operación de cualquier artefacto representaba un recordatorio constante del funcionamiento del fenómeno físico. Así dedicados a aprovechar el día, compartíamos el saber una gran mayoría de seres humanos, ya sean los inventores, o los que nos denominábamos orgullosamente cultores, sólo por la necesidad de saber hacer funcionar la maldita invención.

Ahora no, la cosa cambió, quizá porque se cansaron de niños insistentes preguntando por que?, y por que?, y por que ? o porque representa la consecuencia natural de querer seguir avanzando en la especialización, en aquello que cada vez se sabe mas de menos.

Hoy nos encontramos en la era digital, donde todo se trata de clickear, sin que podamos tomar conocimiento del proceso necesario para que las cosas sucedan de la manera consecuente a haber clickeado, y esta perdida a poder apreciar y disfrutar el proceso nos hace ser excesivamente resultadístas, buscando un resultado atrás de otro, y a veces siento que la falta del mismo nos coloca en posición de ansiedad que buscamos calmar en el conocimiento del proceso...

Y así, de tan eficiente que transformamos nuestro día, por la tarea de aquellos programadores que lograron acotar nuestro accionar al clickeo constante, nos quedamos sin criterio; pero no alarmarse ya que ahora contamos con el tiempo necesario para buscar un nuevo parámetro que con el tiempo llamaremos criterio...